INDICE
El
amor
I
Definición
II
Etimología del amor
III
Tipos de amor
IV
Clases de amor
INTRODUCCIÓN
Amor es una de esas
palabras cargadas de múltiples sentidos. Explicarla con cierto rigor no es
fácil, pues de ella hay un auténtico abuso y para que esto no ocurra es
necesario precisar en el sentido verdadero de la terminología de esta palabra
buscando su esencia para comprender su trascendencia en la vida y el sentido
que tiene vivirla. Dicho de otro modo, hay que poner orden en ese sinfín de
palabras que se juntan en torno al término amor. Es preciso huir de los tópicos que
esta palabra presenta con frecuencia, pues uno se pierde con facilidad cuando
llegan distintas confusiones que, inevitablemente, le quitan o aumentan la
relevancia que en realidad el amor tiene separándola de su verdadero
significado; hay que enfatizar, en cambio, su importancia como forma de vida.
El amor es una
complicada realidad que hace referencia a múltiples aspectos de nuestro ser que
determinan nuestra existencia en las distintas relaciones que tenemos en la
vida; tales casos son, por ejemplo: el amor de amistad, amor al prójimo, amor entre cónyuges, amor de
Padres a Hijos, amor a Dios etc. Es decir, en la vida cotidiana nos encontramos
de una manera palpable con el amor, pero muy pocas veces nos damos cuenta de su
presencia, de su significado. Siendo humanos, nuestra única motivación que tenemos para afrontar todos los problemas que surgen en la vida, el impulso que nos
mueve a seguir adelante y da origen a un sinnúmero de relaciones sociales es,
justamente, el amor. Y, por su complejidad, sólo el hombre es capaz y tiene la necesidad de amar. O
bien, "Sólo la persona puede amar y sólo la persona puede ser amada.
Esta es, ante todo, una afirmación de la naturaleza ontológica, de la que surge una afirmación de
naturaleza ética. El amor es una exigencia ontológica y ética de la
persona. La persona debe ser amada ya que sólo el amor corresponde a lo que es
la persona"
LAS AUTORAS
EL AMOR
I Definición
El amor es una virtud
que representa todo el afecto, la bondad y la compasión hacia un Ser Humano. Es
la firme convicción de que somos buenos, sólo así, comprenderemos el
significado del amor. El Ser Humano que ama, no miente, piensa antes de actuar,
no se cohíbe de hacer lo que le gusta, considera que las actuaciones tienen un
límite, por consiguiente, nunca se arrepiente de lo que hace. El amor es
entendimiento, sabiduría y por sobre todas las cosas, creer que existe una
fuerza creadora y vivificante, que habita cada uno de nosotros. El amor, es
cada uno de nosotros los que entendemos que se vive para amar. Entonces, puedo
afirmar que Yo te Amo.
ü
“El amor que entregamos es el único amor que conservamos.
La única manera de retener el amor es darlo” Elbert Hubbard
ü
“El encuentro entre
dos personas es como el contacto entre dos sustancias químicas: si se produce
una reacción, las dos se transforman”. Carl Jung
ü
“Quien no conoce
nada, no ama nada. Quien no conoce, no puede hacer. Quien comprende, también
ama, observa, ve… cuanto mayor es el conocimiento, más grande es el amor.”
Paracelso.
ü
“Ama hasta convertirte
en lo amado, es más, hasta convertirte en el amor” Facundo Cabral
ü
“El amor es el
arquitecto del universo” Hesiodo
ü
6.- “No existe el amor, sino las pruebas de amor, y la
prueba de amor a aquel que amamos, es dejarlo vivir libremente” Anónimo.
ü
“El amor es lo único
que crece cuando se reparte”. Antoine De Saint Exupery
ü
”El amor no es sólo un sentimiento. Es también un
arte.”Honoré De Balzac
ü
“El amor no está en
el otro, está dentro de nosotros mismos; nosotros lo despertamos. Pero para que
despierte necesitamos del otro.” Paulo Coelho
ü
“El amor es la más alta forma posible de lo erótico, como
la más profunda penetración posible en la textura personal de la otra parte, la
vinculación con algo espiritual.” Víctor Frankl.
II ETIOMOLOGIA DEL
AMOR
En español, la palabra amor (del latín, amor, -oris) abarca una gran cantidad de
sentimientos diferentes, desde el deseo pasional y de intimidad del amor romántico hasta la proximidad emocional asexual del
amor familiar y el amor platónico,2 y hasta la profunda devoción o unidad del amor
religioso.3 En este último terreno, trasciende
del sentimiento y pasa a considerarse la manifestación de
un estado del alma o de la mente, identificada en algunas religiones con Dios mismo
o con la fuerza que mantiene unido el universo. La palabra amor proviene
del latín amor. De ahí la palabra amorío, amoroso, enamorado.
La palabra "Amor”...puede
tener dos significados absolutamente diferentes; no sólo diferentes, sino
diametralmente opuestos.
Un significado, es el
amor como relación de pareja; el otro es el amor como un estado del ser.
En el momento en que
el amor se vuelve una relación de pareja, se convierte en esclavitud, porque
hay expectativas, hay exigencias y hay frustraciones, y un esfuerzo de ambos
lados para dominar.
Se convierte en una lucha
por el poder........el amor como un estado del seres una palabra totalmente
diferente.
Significa que tú
simplemente amas; no estás estableciendo una relación de pareja.
Tu amor es como la
fragancia de una flor.
No crea una relación;
no te pide que seas de una forma determinada, que te comportes de cierta manera,
qué actúes de cierta forma. No exige nada.
EL AMOR Significado
etimológico Diversas acepciones El amor como fundamento de la libertad El amor
en Las Escrituras El amor en le AT El amor en el NT El amor de amistad, el amor
conyugal y el amor familiar La castidad, el precio del amor eterno.
SIGNIFICADO
ETIMOLÓGICO: (del lat. amororis) m. Afecto positivo e intenso hacia alguien o
algo que es o se considera fuente de bienestar mental o espiritual. Objeto de
este afecto. Pasión sexual que atrae hacia otra persona. p. ext. Apego o
atracción sexual que un animal siente hacia otro. Persona amada. Blandura, cariño, suavidad,
ternura. Esmero, deleite y aplicación con que se realiza algo. Voluntad,
consentimiento. pl. Relaciones amorosas. Muestras de cariño, expresiones de
amor, caricias, requiebros. Griego. Amor homosexual. Lesbiano. Amor homosexual entre mujeres. Platónico.
Amor puro y desinteresado. Fam. Amor
imposible. Propio. Orgullo, estimación inmoderada de sí mismo. Afán de mejorar la propia actuación.
III TIPOS DEL AMOR
El amor es un fenómeno
ciertamente complejo y multifacético. En nuestra cultura la palabra amor posee
múltiples significados y es utilizada en contextos y relaciones que difieren
mucho entre sí. Desde el ámbito de la Psicología se han hecho muchos
esfuerzos por acotar el significado e implicaciones del concepto amor, si bien
es cierto que dicha tarea no ha resultado nada sencilla debido a la gran
cantidad de concepciones y puntos de vista existentes al respecto.
Dos psicólogos que se interesaron por esta temática fueron Fehr y
Russell, quienes elaboraron un estudio en el que pidieron a los participantes
que elaboraran una lista con tantos tipos de amor como se les ocurrieran, lo
que acabó derivando en una gran lista con 93 tipos de amor diferentes.
Posteriormente, a otras personas diferentes les preguntaron acerca de lo típico
que les resultaba cada uno de los tipos de amor descritos en la lista, es
decir, en qué medida creían que representaba la esencia del amor. En los
resultados que obtuvieron el amor más prototípico fue el maternal, seguido por
este orden, del paternal, la amistad, amor de hermana, amor romántico y amor de
hermano. Otros tipos de amor tales como el apasionado, el sexual o el
platónico, fueron considerados como amores menos prototípicos en los resultados
de esta investigación.
Otros psicólogos como
Shaver y Schwartz llevaron a cabo investigaciones utilizando un procedimiento
similar. De hecho, examinaron los juicios de semejanza o parecido entre
diferentes términos relacionados con las emociones, encontrando que amor,
afecto, cariño, atracción y cuidado formaban una agrupación bastante homogénea.
Por tanto, lo que estas investigaciones demuestran es que la concepción que la
gente tiene del amor es bastante compleja, no existiendo una delimitación clara
entre el amor y fenómenos semejantes.
La más importante y
más conocida clasificación sobre los tipos de amor es la Teoría triangular
de Sternberg, según la cual hay tres dimensiones o componentes básicos en
el amor, que son los siguientes:
Intimidad, que se
manifiesta como un sentimiento de cercanía, unión y afecto hacia el otro, la
preocupación por promover su bienestar, dar y recibir apoyo emocional y
compartir las propias posesiones y la propia persona con el otro. Baumestier y
Bstslavsky encontraron que este componente del amor incluye una comprensión
empática mutua, actitudes favorables hacia el otro y la comunicación continua
del afecto.
Pasión, que viene dada
como un estado de excitación mental y física. La atracción física y el deseo
sexual son parte importante de este componente. Algunos autores como Baumeister
y Bratslavsky definieron la pasión amorosa como un conjunto de intensos
sentimientos de atracción hacia la otra persona, que se caracterizan por la
activación fisiológica y el deseo de estar unido a ella en múltiples sentidos.
Cabe destacar que si la persona es elegible como pareja sexual, la pasión
incluye la atracción y el deseo sexual. No obstante, también se puede
experimentar pasión hacia un hijo o hacia personas del propio sexo sin que
haya deseo sexual.
Compromiso, que puede
manifestarse a corto plazo como una decisión de que uno quiere a alguien y a
largo plazo como un compromiso de mantener ese amor. Estos dos aspectos no van
necesariamente juntos. El compromiso es un componente del amor que suele darse
conjuntamente con los otros componentes, pero que también puede aparecer solo.
En ocasiones esta es la relación que existe entre dos personas cuando, tras un
largo período de tiempo, la pasión y la intimidad han desaparecido y sólo queda
la voluntad de permanecer en la relación. En los casos en que se producen
matrimonios de conveniencia o arreglados por las familias, este tipo de amor
suele manifestarse al comienzo de la relación.
Por otra parte, en la
teoría de Sternberg se han representado estos componentes del amor, en su forma
pura, como vértices de un triángulo equilátero. Sin embargo, en la práctica
dichos tipos de amor tienden a combinarse entre sí, dando lugar a los
siguientes tipos de amor:
Amor romántico, que supone la combinación de intimidad y pasión.
Se da cuando los amantes se atraen tanto física como emocionalmente, pero ese
sentimiento de unión y compenetración no va acompañado de compromiso. Un
ejemplo clásico de este tipo de amor sería el de Romeo y Julieta.
Amor compañero, que vendría dado por la combinación de los
componentes de intimidad y compromiso. En este tipo de amor predomina la
preocupación por la felicidad y el bienestar de la otra persona, se da un
proceso mutuo de apoyo social, comunicación y comprensión. Las personas se
sienten profundamente unidas entre sí, se valoran mutuamente y comparten lo que
tienen, posesiones, conocimientos e intimidad.
Amor fatuo, que consiste en la combinación de pasión y
compromiso, sin que haya transcurrido el suficiente tiempo para que surja la
intimidad. Este amor se presenta cuando por ejemplo dos personas se casan a las
pocas semanas de haberse enamorado y aún no ha aparecido el componente de la
intimidad.
La combinación entre
compromiso, intimidad y pasión da lugar al amor completo o amor
perfecto. Según Sternberg es el tipo de amor hacia el que la mayoría de la
gente aspira, al menos en sus relaciones románticas. Suele ser difícil de
conseguir, y sobre todo de mantener. No obstante, los seres humanos no buscan
este tipo de amor en todas sus relaciones, ni tan siquiera en la mayoría, sino
que dicho tipo de amor se reserva para aquella o aquellas relaciones que
significan lo máximo para las personas y que han de ser lo más completas
posibles.
Cada uno de los tres
componentes básicos del amor tiene una evolución temporal diferente. En este
sentido, la intimidad se desarrolla gradualmente conforme avanza la relación y
puede continuar siempre creciendo, aunque este crecimiento es más rápido en las
primeras etapas. Con respecto a la pasión, se manifiesta de una manera muy
intensa al principio y crece de forma vertiginosa, pero suele decaer de la
misma forma conforme la relación avanza, estabilizándose en niveles moderados.
El compromiso, por su parte, crece también despacio al principio, más lento
incluso que la intimidad, llegando a estabilizarse en el momento en que las
recompensas y costes de la relación aparecen con nitidez.
El escritor y poeta
uruguayo Mario Benedetti trató con mucha sutileza la temática del amor y el
enamoramiento, aportando frases como la siguiente, en la que destaca el
carácter recíproco y mutuo del buen amor.
“Para estar total, completa y absolutamente enamorado, hay
que tener plena conciencia de que uno también es querido, que uno también
inspira amor”.
LOS SIETE TIPOS DE AMOR
El amor nos inspira a
velar por el bienestar de otros y nos ennoblece como personas. Dios, Bendito
Sea, creó este maravilloso universo a través de Su perfecto amor y
colocó en nuestro interior una "chispa" de su divinidad, una
bella alma, dotada con la sublime capacidad de amar. Imaginemos a un rayo
de luz entrar por la diagonal izquierda de la letra
"A" (semejante a un prisma) de "Amor", salir
proyectado por la diagonal derecha, dividido en siete colores. Cada uno de
ellos exhibiendo una diferente tonalidad de agradable apariencia. De forma
similar, el brillante resplandor del amor que emana del alma, se refleja en
siete relaciones diferentes, poseyendo cada una de ellas un sentimiento
singular. Similar a una bebida o alimento disponible en siete sabores, así
también podemos distinguir siete emociones o tipos de amor.
La Torá dice que sobre
la tierra existen siete cielos espirituales y lo mismo podemos decir sobre el
amor. Para lograr "construir" un rascacielos de amor, antes que nada
hay que preparar "el terreno" con buenos cimientos. La
autoestima es la plataforma que le permite a la persona amar. El famoso
versículo de la Torá que dice: "Ama a tu prójimo como a ti
mismo..." (Levítico 19:18) hace hincapié en la necesidad de
amarnos a nosotros mismos como prerrequisito para amar a otros.
Nuestros sabios
enseñan que la llave adecuada para abrir todos los portones del amor,
incluyendo al amor propio, es por un lado, la capacidad de enfocarse en las
virtudes y en los talentos; y por el otro, aprender a tolerar y aceptar los
defectos. Obviamente es imperativo trabajar en mejorar nuestros aspectos negativos,
sin embargo, estos no pueden ser motivo de falta de autoestima.
A continuación, una
lista de los siete tipos de amor en el orden natural que se presentan en
nuestra vida:
1) Parientes: El primer encuentro del ser humano con el
amor es con sus padres y parientes. La conexión sanguínea es muy fuerte,
profunda e instintiva. La familia es el marco necesario para que el individuo
se pueda desarrollar correctamente a nivel emocional y psicológico. Gran parte
de la autoestima y seguridad personal dependen de la atmósfera de amor que se
vive en casa.
2) Amistad: Existen diversos niveles de compañerismo, sin
embargo, el tener por lo menos un amigo íntimo es una necesidad vital. El
Talmud llega al extremo de decir: "Si no posees un amigo, es mejor
estar muerto" (Taanit 23a). La vida no es fácil, está llena de retos
y dificultades. Constantemente nos vemos forzados a tomar decisiones con
grandes implicancias sobre nuestro futuro. Sin la ayuda de un buen amigo que
nos oriente y nos ayude, es casi imposible tener éxito.
La segunda llave
requerida es la de la lealtad, aprender a ser fieles bajo cualquier
circunstancia, y de sea forma, lograr alcanzar el verdadero nivel del amor
desinteresado. Pirkei Avot enseña que este elevado amor existió entre el Rey
David y Yonathan, hijo del Rey Shaul (5:19). A pesar de que ambos eran rivales
potenciales para ocupar el trono de Israel, lograron superar su egoísmo y
crearon un lazo de amistad y amor total.
3) Matrimonio: En aritmética: 1 + 1 = 2; En
cuestión de desarrollo personal: Marido + Mujer = Uno. Dios
expresó durante todo el proceso de la creación del mundo, que todo lo
hecho era bueno, con una excepción: "No es bueno que el hombre
esté solo, le haré una ayuda en frente de él... Entonces Dios colocó al
hombre a dormir y tomó uno de sus costados... y lo transformó... en una
mujer y la trajo al hombre. Entonces el hombre dijo: esta vez es hueso de mi
hueso, y carne de mi carne... el hombre tiene que... apegarse a su esposa para
ser una sola carne" (Génesis 2:18-24). La única fuente de total
satisfacción física, emocional y espiritual es el matrimonio. Es el único amor
que puede transformar a dos individuos en uno. El valor numérico de las
palabras en hebreo "amor" (ahavá) y "uno" (ejad) es el
mismo .
El libro "El
Río, la Olla y el Pájaro" escrito por Rav Aharon Feldman, cita un
comentario del Gaón de Vilna sobre El cantar de los cantares (5:2) del Rey
Salomón, en el cual explica que existen cuatro catalizadores del amor: 1)
Amamos a alguien que nos da placer físico; 2) A alguien que nos ayuda en
alcanzar nuestras metas; 3) A alguien en quien reconocemos virtudes y 4) A
alguien que sentimos que nos ama. En base a esto, concluye Rav Feldman, para
lograr experimentar amor se requiere: 1) Poder sentir gratitud; 2) Tener metas
en la vida; 3) Salir del egocentrismo y apreciar virtudes en otros y 4) Poder
creer que otra persona nos ama.
4) Hijos: Tener hijos es una necesidad
de todo ser humano y uno de los mayores placeres que existen. Este es un nuevo
tipo de amor, muy especial y muy singular. Hay padres que sacrifican todo por
sus hijos, y su propia felicidad depende totalmente de la felicidad de ellos.
El Rav Elyahu Dessler explica en su libro "En Busca de la
Verdad": "A nivel simple el tener hijos nos da un sentimiento de
continuidad, la muerte no es tan definitiva si dejamos descendencia que nos
suceda". Sin embargo, continua diciendo Rav Dessler, "un motivo aún
mayor, es por la necesidad de tener alguien con quien desbordar amor y afecto.
Esta es la razón por la cual parejas que no pueden tener hijos, frecuentemente
adoptan niños y los educan como si fueran propios... Esta es una indicación de
la profundidad oculta de la facultad del alma del ser humano de querer
beneficiar a otros".
El intenso amor
instintivo que sentimos por nuestros hijos nos puede servir de ejemplo y de
guía para el nivel de amor que también debemos alcanzar hacia el prójimo. El
amor a los nietos es una extensión de este amor.
5) Padres: El mayor regalo posible es la
vida, la cual se la debemos a nuestros padres. Aún más, todo lo que logremos
alcanzar como personas, en una gran proporción se lo debemos a ellos. Mencioné
anteriormente, en el primer tipo de amor, a los padres ya que naturalmente los
amamos y los respetamos, sin embargo, cuando nosotros mismos nos convertimos en
padres, entonces podemos apreciar mejor y con mayor madurez, todo el sacrificio
y esfuerzo que dedicaron en nuestro bienestar. Como niños y jóvenes percibimos
equivocadamente, que todo lo que recibimos es porque lo merecemos y no reconocemos
este sacrificio y nivel de entrega. En esta nueva etapa de la vida, en la que
apreciamos todo lo que hicieron por nosotros, entendemos que nuestra percepción
estaba errada y podemos fortalecer nuestro amor hacia ellos.
6) Al prójimo: El ser humano es una criatura
social y necesita compartir con otros todas las ocasiones importantes, tanto
alegres como tristes. A nivel profundo existe un motivo para esto y lo podemos
entender a partir de la mitad de amar al prójimo. Anteriormente
cité el versículo de la Torá que dice: “Ama a tu prójimo como a
ti mismo..." (Levítico 19:18); en el comienzo del mismo
dice: "No tomes venganza ni guardes rencor contra los miembros de tu
pueblo". El Talmud Ierushalmi explica el motivo de estas
prohibiciones a través de una parábola: "Si una persona que estaba
cortando con una mano, por error se causa una cortada en la otra, tiene sentido
que ahora la mano cortada tome revancha y haga una cortada en la "mano
agresora"? Con este ejemplo nos enseña que todos estamos unidos espiritualmente.
El rabino Dessler
explica que cuando una persona da a otros, esto provoca que los ame, al
"ver" en otros una extensión de sí mismo. También requerimos
enfocarnos en las virtudes de otros como herramienta para fortalecer el amor
hacia ellos.
7) Amor a Dios: Por último, llegamos al
"Penthouse", a la "Casa de Dios". Para el judío, Dios,
Bendito Sea, no es un concepto abstracto o filosófico, sino una realidad
"tangible". El enorme universo, nuestra propia vida, todas las experiencias
que podemos captar a través de los cinco sentidos y todas las emociones que
podemos sentir, son regalos que Dios nos dio y nos continúa dando. Todo lo
que existe fue creado por Su amor hacia nosotros y lo único que nos pide a
cambio, es que lo amemos. No porque Él lo necesite, sino porque nos da la
enorme oportunidad de relacionarnos con Él.
Al apreciar la belleza
y la grandeza del cosmos y ver la enorme sabiduría y perfección de todo lo que
existe, podemos llegar a conectarnos con Él. También al estudiar su Torá y
entender el sentido de la vida y de todo lo que fue creado, logramos fortalecer
este valioso amor.